Mientras la visión era borrosa en ese tren, cerré los ojos.
Me aferré a un rincón de tu ropa para ver si el tiempo era capaz de detenerse y retroceder, por lo menos, cuatro días. Pero eso no sucedió...
Me hiciste creer -ingenuamente, sin intención- en que se podía intentar, pero ya ves, no se puede, no tuviste el coraje suficiente.
Me he cargado de fuerza y de voluntad, empecé a olvidarte porque ni siquiera en nuestra última llamada dejaste de arañar de regreso.
sábado, 6 de agosto de 2011
Recomenzar...
Publicado por exorcizadaconmachete en 8/06/2011 12:36:00 p. m.
Subscribe to:
Enviar comentarios (Atom)
0 Comments:
Post a Comment